Un joven de 28 años se encuentra en grave estado en el Hospital Centro de Salud después de haber sido atacado por una jauría en Yerba Buena. La Policía y la Justicia investigan el hecho, ya que hasta el momento no quedó claro si el herido ingresó a robar o a cortar naranjas del fondo de la vivienda de una vecina.

El caso se registró ayer por la mañana en una casa ubicada en La Madrid al 2.700, Yerba Buena. Según denunció la propietaria, cerca de las 11.30, comenzó a escuchar que los más de 10 perros que son de su propiedad ladraban desaforadamente. También escuchó gritos pidiendo auxilio y voces de los vecinos tratando de tranquilizar a los canes.

Uno de los habitantes de esa zona filmó el ataque de los 15 animales. En las imágenes se puede observar cómo los canes, además de morderlo en diferentes partes del cuerpo, le arrancaron toda su ropa. “Fue una locura. Con un palo, la dueña de la casa trató de impedir que los perros siguieran mordiendo al chico. Recién logró separarlo cuando intervinieron dos vecinos que lograron separarlos. A uno de ellos, un animal lo mordió”, indicó Julieta García, que vive en esa zona.

Múltiples heridas

Los testigos indicaron que después de haber logrado que los perros se fueran del lugar, llamaron a una ambulancia para que asistieran a la víctima. Al observar el estado en el que se encontraba, los profesionales lo trasladaron de urgencia al Centro de Salud. Según los primeros informes, el muchacho (cuyo nombre no se publica por cuestiones legales) sufrió heridas en diferentes partes de sus piernas y glúteos, en la garganta y la amputación de parte de sus órganos genitales.

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La dueña de casa se presentó ante las autoridades y denunció que el joven era un vecino suyo al que identificó con nombre y domicilio. En su exposición sólo informó que había ingresado a su domicilio sin su autorización, nunca señaló que le haya robado algo o que la haya amenazado para quedarse con algún bien de su propiedad.

Según explicó el jefe de la Unidad Regional Norte, Gustavo Beltrán, el herido habría saltado la tapia perimetral de un domicilio en el que viven tres mujeres de avanzada edad y fue allí cuando lo atacaron los canes. “Se trata de una persona que ya tiene antecedentes por robo, hurto, todos penales. Los vecinos no nos manifestaron si ya habían tenido problemas de esta índole con él anteriormente pero sí dijeron que es el típico vecino mañero”, comentó.

La madre del herido, por su parte, indicó que su hijo había ingresado para cortar naranjas, como lo hacía habitualmente. Indicó además que él conocía a la mujer y que normalmente lo autorizaba a hacerlo. Se mostró sorprendida por la reacción de los animales, ya que nunca antes habían tenido un comportamiento de estas características.

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El caso cayó en manos de la fiscala María del Carmen Reuter. Enterada de la situación, ordenó una consigna policial en el hospital para evitar que el joven se fuera sin que se aclarara su situación. El jefe de la URN, por su parte indicó que no se montó una custodia al no haber una medida privativa de la libertad. El personal de la fiscalía entrevistó a la madre del herido que dio a conocer su versión de los hechos. Al cierre de esta edición, los instructores del expediente hacían lo mismo con la dueña de la casa para esclarecer el caso.

Hasta el momento, no se le formuló ningún cargo al joven. Por ahora, sólo podría ser acusado de haber ingresado al domicilio de la mujer sin autorización, ya que no fue denunciado por hurto con escalamiento. Las penas de estos delitos son de cumplimiento condicional. Fuentes allegadas a la causa señalaron que hay versiones que indican que el joven tendría problemas de adicciones.